dimarts, 21 d’octubre del 2014

ES PARA TI

Mi nombre es Sara Arnau y estudié 1º y 2º de Bachiller HUMANÍSTICO (o de letras, como prefiráis llamarlo) en el IES Llombai.


Primero que nada creo que es necesario mencionar que no soy una estudiante destacable. No soy una persona inteligente, y por ese motivo debo esforzarme más a la hora de alcanzar mis objetivos.
Recuerdo cuando empecé primero. Era un mar de dudas. Compañeros nuevos, profesores nuevos, centro nuevo… todo nuevo. Y ya desde el principio, SELECTIVIDAD.


Se que algunas de las personas que han escrito en este blog ya lo han mencionado, pero voy a repetirlo. LA NOTA DE PRIMERO TAMBIÉN CUENTA.


No te haces una idea de lo que me arrepiento por no haber trabajado más durante mi primer año. Pero bueno, qué le vamos a hacer. Me saqué el curso como pude, y con una media nada brillante, pasé a segundo.


Y aquí la cosa se intensificó.


De entrada te diré que el primer día de clase llegué tarde y me equivoqué de aula. No es el mejor comienzo, pero es un comienzo. Y la eterna palabra ya estaba ahí, SELECTIVIDAD.
Una palabra que oirás miles de veces (en serio, miles), pero si te lo repiten tanto, por algo será.


Así pues, SEGUNDO. A ver, estudiante. Respira hondo. Te lo voy a explicar. Segundo es difícil, sí, pero si te organizas bien el tiempo y trabajas al día, te lo sacas, y te lo sacas bien.
Me veo en la obligación de decirte algo. Disfruta del Bachiller. Son dos años preciosos (o tres o cuatro, depende de lo mucho que te guste) donde aprenderás una serie de conocimientos y valores que te marcarán en tu vida. No solo aprenderás sobre filosofía, literatura, latín o historia, no. Aprenderás sobre la vida. Todo esfuerzo tiene su recompensa, pero nadie te va a regalar nada. Siento ser dura, pero la vida no es GRATIS. Los mejores resultados son fruto del trabajo duro.
Y dicho esto, me gustaría centrarme en otra cuestión. APROVECHA TODAS LAS OPORTUNIDADES QUE TE OFREZCAN. Todas. En serio. Me refiero a concursos, olimpiadas, carreras, cursos… Todo lo que esté a tu alcance.
No pienses en ningún momento que no vales para eso.
Yo recuerdo que durante el Bachiller me apunté a bastante cosas. Desde el famoso concurso del Huevo, hasta el de Rotary.
Y no me apunté a esto porque pensara que podía ganar, me apunté porque podía hacerlo (el participar, me refiero). No desaproveches ninguna ocasión infravalorándote, pensando que nunca conseguirás ganar nada. ¿Y qué, si no lo has conseguido? ¡Pero lo has intentado!
Eso sí. No pongas excusas. Porque sólo te estás engañando a ti mismo.

Escribí la redacción con la que gané el concurso del Rotary durante dos semanas en las que tenía exámenes, y para coronar, todos los miembros de mi familia cayeron enfermos de gripe, obligándome a mudarme de casa temporalmente.
Así que, querido lector, no te mientas. Si no lo haces, es porque no te da la gana.


A todo esto, no es por “chulearme”, pero gané. Sí, gané el concurso. Te lo cuento porque este hecho me ha permitido vivir una de las mejores experiencias de mi vida. Pasé, probablemente, las dos mejores semanas de mi vida.
El Club Rotario me brindó la oportunidad de elegir un destino (elegí Alemania) para viajar y realizar una serie de actividades para mejorar mi inglés.
En esas dos semanas aprendí más inglés que en toda mi vida. Hice amigos de todo el mundo (con los que aún tengo contacto). Taiwan, Rusia, Lituania, Brasil, Croacia, Dinamarca, Israel, Egipto, Turquía, Italia, Irlanda… un grupo de lo más diverso. Aprendí sobre diferentes culturas, religiones, costumbres, normas de educación… fue increíble. Además, realicé actividades como “sailplaning” (vuelo sin motor), esquí acuático o canoa.
Y este intercambio cultural me abrió tanto la mente como algunas puertas (estoy invitada a visitar Taiwan, Rusia y Dinamarca) ;).






Todo esto ocurrió tras la Selectividad. Sí, lo siento pero volvemos al tema.


Yo realicé la Selectividad y me sorprendí. SELECTIVIDAD está chupado al lado de Bachiller. Los exámenes se te pasan volando. No tienes tiempo de pararte a pensar “¿Y si no llego?¿Y si suspendo?” Y en tres días, se acaba todo.
Tanto sufrimiento, tanto trabajo, tanto todo para esos tres días. Así que, por muy agobiado que te veas, no tires la toalla. Porque lo entiendo. A final del curso estás cansado, piensas en dejar dos o tres para el año siguiente… no lo hagas.
Da lo mejor de tí hasta el final. Porque tal y como ya he mencionado antes, la mejor recompensa viene con el mayor esfuerzo.


Y sobre la carrera que vais a elegir… eso ya es otra cosa. Yo no supe lo que quería hacer hasta tres meses antes de la selectividad. Lo decidí el día que fui a Valencia a ver universidades con mi clase.
Fui a ver la facultad de Bellas Artes, porque me picaba la curiosidad. Y me enamoré de la carrera.
Tras esa visita, empezó en mi interior un debate. “BBAA no es una carrera con mucho futuro”,”Es muy difícil ganarse la vida así”.
Supongo que esta lucha interna la tenemos todos. Pero llegué a la siguiente conclusión:


“SI ES DIFÍCIL GANARSE LA VIDA CON ESTA CARRERA, NO VOY A DEJAR DE HACERLA POR ELLO. ES LO QUE ME GUSTA, ASÍ QUE ME ESFORZARÉ”


Porque sí, el futuro es importante, pero el presente también. Debes elegir una carrera que te guste a ti. No a tus padres, no a tus amigos, ni a nadie más. Son cuatro años de tu vida (o más, depende de la carrera). No los desperdicies haciendo algo que no te guste.


Seguidamente, la pre-inscripción. Para mi fue bastante fácil de hacer, porque lo tenía bastante claro (aunque pienso que nadie está totalmente seguro de haber tomado la decisión correcta, así que no te preocupes). Ese día hice los trámites junto a una amiga. Y admito que me emocioné. Me emocioné porque podías elegir la carrera que quisieras. Estaba a tu alcance. Yo me volví loca y me entró “la tontería”. Puse mis dos primeras opciones (Bellas Artes y Restauración), y tras eso me dediqué a rellenar las otras casillas con carreras como medicina, microbiología, química, nanorobótica… vamos, carreras en las que no iba a entrar jamás. Pero a mi me entró la risa en ese momento y me pareció lo más gracioso del mundo. Pues bien. Os aclaro algo. No hagáis esa tontería. Porque yo entré en una de las opciones que quería, pero se de alguien que hizo la misma estupidez y lo cogieron en Podología, cuando su meta era enfermería. Y os aseguro que el susto que se llevó fue grande. Así que, no seas tan inmaduro como yo y tomatelo más en serio.


Y finalmente, la matrícula. Yo no entré en mi primera opción. Me sentía la persona más fracasada del mundo. Estaba muy desanimada. Y empecé el curso. Pero me sorprendió.
Las clases eran muy interesantes, los compañeros me encantaron. Hice amigos rápidamente e incluso llegué a ser elegida como delegada.
Pero un mes después me llamaron. Yo estaba en lista de espera para estudiar BBAA, y la lista se había corrido. Había entrado en la carrera. Rápidamente hice los trámites y el mismo día empecé. Volví a hacer amigos. Y empecé a trabajar. Mucho.
Que no os cuenten mentiras. En todas las carreras se trabaja. Mucho. Pero cuando uno disfruta con lo que está haciendo, el tiempo pasa volando y el trabajo no se vuelve pesado.


Así pues, mi consejo es el siguiente. Esfuérzate. Aprovecha todas las oportunidades que la vida te ofrece. No pienses que no vales. Si de verdad quieres algo, ve a por ello. Y disfruta el día a día, porque el ayer no vuelve.


Otro consejo para el que tenga pensado estudiar BBAA. En esta carrera se trabaja mucho, ya que es todo muy práctico. Si no te gusta trabajar, no te aconsejo hacerla.
Y si estás en primero y lo tienes muy claro, tal vez deberías plantearte hacer el Bachiller Artístico, porque estudiando" Letras",cuando llegue selectividad solo te ponderará una asignatura (Hª del Arte). Si por el contrario, no estás seguro, deberías hacer el Bachiller Humanístico, como yo. Yo no me arrepiento de mi decisión, pero he tenido que "currarmelo" bastante para llegar a la nota (te aviso). Y no te digo esto para desanimarte, no. Te lo digo con el objetivo de mostrarte como están las cosas. Si finalmente decides entrar en BBAA, felicidades. Es una carrera maravillosa y pienso que realmente vas a disfrutarla.


PD: Gracias a todos los profesores que me han enseñado durante mi paso por el Llombai, en especial a Rosana, por creer en mí cuando yo no lo hacía y por enseñarme a sacar lo mejor de mi.

2 comentaris:

  1. En primer lloc vull desitjar-te molta sort en belles arts. L'entrada em pareix fabulosa. Com vas narrant la teua història m'agrada molt i la quantitat de bons consells que deixes també. A més, ja era hora de que algú posara alguna fotografia.
    Preciós el que comentes de Rosana Franch. Quanta gent que la ha tingut de professora pensarà el mateix.
    Tinc una pregunta per a tu, però millor si la contestes en la propera entrada: creus que és un gran problema fer belles arts sense haver fet el batxillerat d'arts?
    Espere llegir prompte una altra entrada teua on ens comentes la carrera que estàs fent per dins, coses de la universitat i el que tu vulgues compartir amb tots els lectors del bloc.

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  2. Sara ,yo creo que queda demostrado en tu entrada la clase de alumna que eres. No te das importancia a ti misma ,es mas ,te descalificas al principio de tu texto(cosa que me parece muy mal),pero consigues todos tus objetivos: selectividad ,premio Rotari…,la carrera soñada.
    Hay una cosa que me ha gustado especialmente de tu entrada. Das buenos consejos. Que aprovechen primero para subir nota ,que elijan lo que realmente les gusta ,que no hagan tonterías con el orden de elección de carrera.
    Eres una persona que ve lo esencial, y te muestras como eres sin intentar aparentar mejor ante los demás.
    Tienes lo fundamental buen criterio para discernir y humildad para relacionarte con los demás.
    Tengo un concepto genial de ti, vales mucho ,aunque a veces tú no te lo crees .Pienso disfrutar de tus entradas y comentarios por mucho tiempo. Estoy segura que vas a triunfar en la vida ,que para mí es ser feliz.

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